¿Se acuerdan ustedes? |
La gente está de uñas con las figuras del toreo, como
influidos por mal viento, los públicos de todo el mundo han vuelto sus garras
hacia los artistas más artistas de la historia artística del arte del toreo
artístico. Ha bastado con dejar plantada a la Maestranza para que se desate la
iracundia del respetable. No está dar un plantón tan monumental a tan
sobresaliente dama, pero a lo mejor esto se podía vislumbrar desde hace tiempo,
cuando esta chavalería ventoseaba con estrépito en la arena del Baratillo. Como
les reían las gracias cuando exigían el borrego, no entendían que no se les
rindiese culto divino, ni admitían que nadie les ensombreciese su vulgaridad,
incompetencia y falta de afición. Pero el aficionado a los toros es muy vulnerable
a la ilusión, no necesita grandes logros para que empiece a pensar en lo que
pudiera llegar y se autoproclame protector y devoto de simples apuntes de
promesas. Lo que pasa es que aunque estas no siempre se cumplan, esto no quiere
decir que el parroquiano se apee de su fe torerista. Resulta complicado
reconocer un error, que realmente tampoco llega a serlo, pues a todos se nos ha
acelerado alguna vez el pulso al ver a un novillero pegar dos verónicas y una
media o una serie de naturales abrochados con el de pecho. Que puede incluso
que no alcancen los niveles mínimos que se deben exigir, pero basta con eso del
“tiene algo”.
Lo malo llega cuando el mismo espada y su “entorno” se
agarran como a un clavo ardiendo a ese “tiene algo” y se deciden a iniciar una
campaña favorable para el prometedor
coletudo y acaban convirtiéndolo en lo que ni por asoma podría llegar a ser.
Basta un gestito para que la centuria de adeptos se convierta en un manípulo,
esta en una cohorte y esta en la Legio VIII Augusta. Y claro, mucho se le
tienen que torcer las cosas al “elegido”, para que los fieles se apeen de su
posición de “yo le descubrí de becerrista” Que ya se sabe, que el ser humano
lleva mucho mejor el que le roben la cartera tarde tras tarde, que reconocerse
engañado. No sé si hubo algún aficionado que no se ilusionara hasta el infinito
con El Juli. Fue verle en la tele en Chinchón y ya sentíamos que había vuelto
Joselito El Gallo. Intentábamos calmar tanto entusiasmo, pero dentro de
nosotros bullía tanta ilusión de grandes tardes futuras, que resultaba
imposible contenerse. Vino a Madrid de novillero él solo con seis animales
escogidos y animó el cotarro con esa fuerza juvenil que tenía. Pero bueno,
tampoco había que exigirle que aquel día fuera su primera página de oro nada
más abrir el libro. Pero luego no acababa de cuajar en lo esperado. Más tarde
llegó que si se le tenía manía, como si fuera un mal estudiante, que si la
suerte, que tenía capacidad para poder con todo, una tarde aceptable con un
sobrero de la familia política y esos intentos de manejar y adaptar todo el
mundo a su comodidad, bailes de corrales, plantes, geses y corridas con ganado vergonzante,
ya sea en España, América o la China maoísta. No hay quien le vea con el toro,
no hay quien le enfrente a otra cosa que no sean los juanpes o ajuampedrados y
seguimos pensando que es un torero que puede, pero no quiere. Pues habrá que
ver ambas circunstancias.
Otro que nos llevaba a la plaza era Perera, ¿recuerdan aquel
chaval honrado, humilde y con ganas de comerse el mundo aunque llevara el alma
en canal? Pues de aquella verdad nos ha quedado un toreo monótono, vulgar,
tosco, ventajista y una aparente soberbia en el ruedo, que más parece que
quisiera fastidiar al respetable que deleitarle con su toreo. ¿No quieres
caldo? Pues toma tres tazas; y aquí llegan esas faenas desesperantes y
aburridas, que luego le jalean con eso de que ha estado muy serio. Hay que
reconocerle que en 2014 se anunciara con una de Adolfo en la que no desentonó,
la verdad, pero puede que esto sea demasiado poco para un figurón, ¿no?
Seguimos con Talavante, el sustituto de José Tomas, el nuevo mesías después del
mesías. ¡Cómo manejaba la zurda! Hasta que se acomodó y punto, aunque por el
momento deberíamos esperar, pues está claro que quiere volver a sus orígenes y
después de tanto amaneramiento, esto no debe ser nada fácil. Castella era de
los que nos encogían el corazón, pero otro de tantos, vulgar, monótono y sin
toro. El Cid quizá sea más un torero en declive, que no una esperanza frustrada,
pues durante varias temporadas se mantuvo en un muy buen nivel. El caso de
Manzanares la verdad es que no sé dónde encajarlo, pues no sé ni si tan
siquiera llegó a ser una promesa o simplemente le colocaron ahí por las buenas.
Puede que sean muchos los que esperen poder ver algo que les despierte la
ilusión.
Pero quizá el caso más sangrante, sobre todo tras ese plante
a Sevilla, sea el caso de Morante de la Puebla, el más grande artista de la
historia del toreo, el que detiene el tiempo, corta la respiración, pero yo me
pregunto, ¿cuáles han sido los méritos reales de este torero en plazas
importantes? Muchos me recordarán aquella tarde de Bilbao, aquel bello inicio
de faena protestado y aquella interminable labor muletera de más de setenta
pases, sin que el toro se enterara. Algunos dijeron que eran más de cien, pero
dejémoslo en unos 70, tampoco hay que ser tan sangrante. Poses forzadas como si
tuviera delante al barrabás más barrabás de todos, los barrabases del
barrabaserío, cuando lo que allí había era un borreguito tambaleándose. La
torería que pareció beber de Paula se ha convertido en un histrionismo casi
ridículo y chabacano. Un torero que sí que es verdad que hizo enloquecer a la
plaza de Madrid con su capote, pero nada más, aún se le espera un natural o un
derechazo templazo y toreando. Ese artistazo se limita a la pañoleta grande,
las maneras solemnes, el café, el puro y los descaros con el público disidente
y los presidentes reticentes. Y lo querían comparar con uno de Camas. ¡Ay
señor! Uno tiene la sensación de que aún juntando los méritos de todos los
evadidos de Sevilla, no llegarían ni a la quinta parte de lo que dio Curro
Romero. Quizá ahí reside la diferencia, a unos se les idolatra por lo que se
cree que pueden hacer y a otro se le venera por tardes irrepetibles, unas de
escándalo y otras de gloria bendita. Uno hizo su historia a golpe de arte y los
otros rellenan currículum y ya se sabe, que estos se engordan sin reparo y lo
mismo que el inglés es nivel medio, en lo del toro deberían poner medio nivel.
Uno se pone a hacer recuento y se da cuenta, con mucho pesar, que “parecían
otra cosa”.
14 comentarios:
Enrique:
Me encanta la entrada, bueno, como todas, pero esta es realmente buena por el analisis de los que manejan el cotarro de esto. Yo voy a hablar solo de dos de los que has nombrado.
Del Juli te puedo decir que lo he visto en un par de tardes importantes, además ya te lo he comentado en persona. Creo que es un torero muy poderoso, pero demasiado acomodado y que el tema se le ha subido demasiado a la cabeza.
Lo de Morante, pues bueno, ya sabes que soy Morantista, defraudado, pero Morantista. Te puedo contar muchas tardes de Morante, también te digo que desde que Curro y Paula se fueron, nadie torea como lo hace Morante. He visto detenerse el tiempo con una media de Morante, lo he visto LIDIAR a la perfección a Victorinos, lo he visto dejarse pegar una cornada por amor propio cuando lo han pitado desde el tendido, pero creo que las musas le están haciendo demasiado daño.
Con respecto a Curro, ninguno de estos, ni por asomo, puede hacerle ni sombra. ¿Sabes cual es la diferencia de todos estos con Curro?, que cuando llegas a casa ya no te acuerdas de lo que han hecho, mientras que una faena de Curro se recordará por siempre.
Un abrazo.
Enrique, a raíz del apunte que dejas en esta entrada: Morante pasando de capa... me he ido a buscar fotos de Curro toreando de capa (que no es lo mismo). Aunque reconozco que en alguna ocasión, Morante me ha emocionado, siempre alego ante mis amigos (con los otros no hablo de Toros)que el problema de Morante(para mi) es que no se cruza. Me ha costado mas de un desprecio (especialmente por parte de algunos morantistas, incapaces de analizar con objetividad el toreo del de la Puebla). Conste que no es una observación hecha a la ligera. Durante mucho tiempo decía: Hay algo en Morante por lo que no me llena, aunque me guste. En cierta ocasión, en Granada en corrida televisada, pero vista en la Plaza, estando solo "lo descubrí"...Es importante lo de estar solo. Cuando voy con los amigos aficionados, se discute sobre la marcha y se escapan cosas. (A los Toros habría que ir solo...). Pues allí en el tendido 11 de la Plaza de Granada, donde mas pega el sol... me percaté: Morante...¡no se cruza!. Llamé a mis amigos por teléfono (ese día estaban en sombra, le habrían regalado la entrada...). Se lo dije: Ya se lo que hace que Morante no me llene...
Me estoy enrollando...
Mira tu apunte (tu dibujas lo que ves)y compara con fotos de Curro a la verónica... El toro va siempre dentro del capote... no se ve (casi nunca) el pitón contrario...
Un abrazo y perdona mi rollo..
Buenos dias señor Martin, ha puesto usted con buenas palabras lo que pienso yo de esta caterva de antitaurinos.Un analisis mas que acertadisimo. Desearia colgarlo en Facebuuk, asi que, con su permiso.
un saludo.
Kaparra
Marín:
Estos solo podrían hacer sombra a Curro, sujetándole el toldillo, si no, ni soñarlo. Grandísimas figuras y hay que ir rebuscando sus buenos momentos, y como bien dices, lo hecho por Curro no se olvida ni aún pasen mil años.
Qué cosas.
Un abrazo
Fabad:
¡Clavao! No se podía decir mejor. Curro parecía que llevaba el toro enganchado a la tela, era como si le embrujara. Igual simplemente era que toreaba. Y el toro dejaba de seguir la tela cuando ya no podía retorcerse más. El otro, el de ahora, abaniquea de dulce, con posturitas de dulce, con ademanes de dulce y un público de más dulce, pero lo de torear...
Un abrazo y gracias por elegir esta grada para... "enrollarte". Un lujo
Kaparra.
Muchas gracias, por supuesto que doy permiso, para esta entrada y para las que considere usted. Un verdadero placer.
Un abrazo
Existen cosas en el mundo cuyo desentrañamiento requieren buenas dosis de inteligencia , conocimientos , estrategia ; en definitiva, cualidades que no poseemos el común de los "ciudadanos/as" – (homenaje al cordonier que tuvo gran relevancia, junto a otros muchos , en llevarnos a la miseria )-.
Pero en esto de los toros y pese a teorías interesadas que quieren hacernos creer que porque de toros no entienden ni las vacas, se necesitan unas entendederas fuera de lo normal para apreciar la Fiesta y lo que sucede en ella , la cosa es mucho más simple y ,como el NODO , al alcance de casi todos los españoles.
Veamos la simpleza del asunto:
1. Si no hay toro, no hay Fiesta de los toros.Será Fiesta de lo que quieran llamar sus irresponsables,pero no de los toros.
2. Si no hay toro no hay torero y todo lo que haga el de las medias rosas - incluída su trayectoria casi siempre “espectacular” - no tiene casi valor, al contrastarlo con el “patrón Fiesta” que es el toro.
3. Como deducción bastante lógica de lo anterior,a los voceros e idólatras de estos “figurones”-
(Escuchemos a la RAE:
figurón.
(Del aum. de figura).
1. m. Hombre fantástico y entonado, que aparenta más de lo que es.)
,que no se enfrentan al toro,por muy fantásticos y entonados que diga la RAE que son, y por tanto no deben ser considerados toreros , tampoco se les debería llamar aficionados a los toros.Más bien a los toreros.
De estos tres puntos se puede ,razonablemente, llegar a la conclusión de que todo este marimoñeo de Sevilla,Castellón,Valencia, el FIT ,los figurones, los salva Fiesta de allende los mares,los colaboradores necesarios,sean de la France,de Mairena o de Albacete,los “comunicadores” que se prostituyen (aunque no cobren) alabando la vileza y silenciando la verdad . La autoridad,si la hubiese,encargada de velar y fomentar lo que siempre ha sido la Fiesta Nacional y la cantidad de papafritas que todos los dias estan dándose homenajes, creando y entregandose premios y colgajos, intentando hacernos creer que es la brillantez y verdad de la Fiesta actual y no sus ganas de francachela, las motivan todo ese aluvión de celebraciones;no es más que el sálvese el que pueda y aquello que dicen que ironizaba el Beni de Cádiz:"Vamos a llevarnos bien….todo lo que podamos".
La Fiesta no está teniendo ni un entierro decente.
Que salga el toro y veremos como,por ensalmo, desaparecen los figurones,las mercancias averiadas que intentan ponerse de nuevo en el escaparate al amparo de su inexistencia provocando en el aficionado un entusiasmo perfectamente descriptible, y casi toda la cochambre que hoy campa por sus respetos.
Posiblemente no sería una Fiesta perfecta,pero si el toro manda,sería una Fiesta honesta,concepto bastante en desuso en la actualidad.
Muy interesante también comprobar si ,con el toro en presencia, volverían los aficionados que han desertado de esta mascarada y sobre todo,si los que van ahora a ver ponerse bonito a su figurón un día de feria oliendo a canelita y clavo,se aficionan a la Fiesta de los toros , aunque haya que oler a miedo,sangre sudor y lágrimas y hacen que retornen las plazas de temporada,suba en número de festejos, el abanico de buenos toreros,y se vaya al infierno esta tropa de “corazones sensibles”, a quienes incomoda mucho menos que masacren a un no nato , a un negrito,en definitiva a un ser humano, que a su Pluto le de el moquillo.
Los grandes problemas suelen tener soluciones muy definidas y fáciles de detectar.
Hagamos salir al toro, privilegiemos la enseñaza,saneemos la justicia ,mandemos a todos los corruptos a hacer un vergel del Sahara y habremos casi resuelto el problema de la Fiesta y de paso si me apuran, el de “este país”.
Hay que ver donde nos lleva esto de los Toros.Con razón D.José Ortega y Gasset……………
Me temo que los que hablan de Curro, o no la han visto torear jamás o, si lo han visto, lo recuerdan bajo el síndrome de "cualquier tiempo pasado fue mejor".
Curro era un torero pinturero, con empaque y torería que acompañaba con gracia la embestida de los toros.
Tuvo la suerte de que, en su época, había pasión en los toros y de que Sevilla estaba loca por crear un mito torero.
Curro, con las exigencias de hoy, sería un Curro Díaz cualquiera, un torero agradable de ver y nada más.
Hoy no se tolera la forma de torear de Curro: embarcar con el pico, culito hacia afuera, pasecito corto, ausencia de temple, sacar el pechito cuando el toro está pasando. Revisen los videos, por favor, y, antes de masacrar a los toreros actuales, reflexionen y juzguen sin prejuicios, aunque me temo que es demasiado pedir.
Un saludo.
LCA
Franmartín:
No me asombra ni mucho menos el recibir un comentario que es una entrada en si mismo, porque de la mano de quién viene espero saber y más saber. Es un deleite meterse en el texto e ir encontrando sensatez y afición, algo tan en desuso hoy en día. No se puede poner ni quitar, ni un punto, ni una coma y desde la primera letra siempre hay un elemento presente que no escondes nunca, EL TORO. Todo desemboca en el toro, todo nace y muere en él. Y quizá esta sea la gran diferencia que existe entre lo que añoramos y lo que nos harta y nos quiere echar de este circo. El toro nos atrapó y la falta de este nos repele. Lo de darte la enhorabuena me parece inútil, pues solo sería una formalidad, pero muchas gracias por aportar sabiduría y sentido común y recordarnos que todo esto no es tal si no hay toro.
Un abrazo
LCA:
Me gustaría poder dirigirme a usted por su nombre y no por unas iniciales. Gracias por la recomendación de revisar vídeos, pero no creo que sea necesario para los que le vieron torear en la plaza. En estos casos el vídeo es un estorbo. Y veo su dolor al tratar a los que hoy se visten de luces al emplear eso de masacrar. Pero le voy a tomar el término y quizá se lo podíamos aplicar a esos "masacrados", que son los que están masacrando la Fiesta de los toros, únicamente para su acomodo y provecho. Lo que si me extraña es que todo lo enfoca hacia los toreros, los toreros y los toreros, pero no hace ninguna referencia al toro, como buen conocedor de los modernos y el toreo actual, esto del toro es superfluo y ¡ojo! que Curro no mataba regularmente alimañas, elegía lo que toreaba, pero nunca hubo el bochorno y vergüenza de estos que calzan las rosadas y que la montan hasta en las plazas de carros.
Pero estese tranquilo y felicítese, que Curro ya no volverá y los "masacrados" aún tienen para rato.
Un saludo
Será eso, que no hemos visto torear a Curro. Que hoy en día me hablen de "acompañar" las embestidas o "embarcar con el pico" para poder rajar de Curro me parece...mejor me llaman gilipollas y me duele menos.
He escuchado hablar de las "exigencias de hoy en día"?. No sé Enrique, pero ¿el LCA no es una droga sintética de estas que producen alucinaciones?...pa ir a mear y no echar ni gota.
Perdona que haya entrao a quites Enrique, pero es que como no he visto nunca torear a Curro, me he tenido que poner a buscar vídeos de las figuras de hoy en día y al no encontrar ninguno de estos cuatro o cinco con Miura, Dolores Aguirre, Cebada Gago, Cuadri y compañia me he quedado un poco "payá". Anda queee...
Marín:
Quizá haya una diferencia en la que no hemos caído y que tú me has despertado, igual las mayores exigencias de antaño eran las que ponía el toro. Un toro que aún siendo comercial en aquellos tiempos, hoy en día no podrían con él, especialmente los "masacrados". Pero si se les acuesta un poco un toro por un pitón y ya no saben que hacer.
Un abrazo JMPM
Buenas noches,hay un dicho que es en "rio revuelto ganancia de pescadores" y creo que esto es lo que está pasando en Sevilla, nosotros nos enredamos discutiendo si la culpa es de las figuras, pero lo cierto es que los beneficiarios de este pleito son la empresa Pagés pues han subido los abonos,
http://www.mundotoro.com/editorial-taurino/pages-declara-el-final-de-la-crisis/189
no pagan el caché de las figuras y además cuentan con los ingresos de la televisión, resultado= +beneficios.
Aparte de eso hay gente como Jose Antonio del Moral que crea teorias de la conspiración de las figuras para derrocar a la empresa actual (el año pasado) pero Yo veo que a éstos (Pagés) no hay quien los eche.
No quiero ser catastrofista pero veo que esto tiene mala solución.
Un abrazo.
Antonio:
Veo esos más de 500 euros que cuesta el abono más barato y es para echarse a temblar. Yo entiendo que el empresario está para ganar dinero, pero ahora mismo esto se ha disparado, nada importa si no es el dinero y los Pagés, como los toreros, como el último que llega solo miran por la pasta, no hay otro incentivo, este lo manda todo. Así nos va.
Un abrazo
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