martes, 2 de febrero de 2016

Una buena charla para el bar

¿Dónde se fue aquella ilusión por lo que iba a venir a mi feria y las combinaciones que se podían dar?


Si hay algo que no se le puede achacar a los aficionados a los toros es su falta de entusiasmo. No me negarán que no es verdadero entusiasmo el pasarse horas y horas en la barra de un bar o en las redes sociales, discutiendo sobre los carteles de las ferias que jalonan el calendario de la temporada taurina. Sinceramente, les admiro. Llevamos años y años dando vueltas a los mismos carteles, con escasísimas variaciones y con interés relativo; si acaso el que los mismos aficionados quieran otorgarle. Que a muchos les puede parecer apasionante un mano a mano, uno de los muchos que se dan, entre López Simón y Roca Rey, Roca Rey y López Simón o Rafaelillo, Ureña y otro. ¡Hombre! puede resultar interesante en cierta medida, pero sin apasionamientos.

Porque lo demás, ya me contarán, Juli, Morante Garcigrande, Zalduendo, Morante, Perera, Castella, Victoriano, El Pilar, Fandiño, El Fandi, Alcurrucén, El Vellosino, Talavante, Ponce, Jandilla, Manzanares y ya tenemos la base de todas las ferias del Mundo mundial. Una buena sesión de corta y pega a todo lo que dé y nos hemos liquidado otra temporada más. Ni tan siquiera hay que hacer un listado de ganaderías y toreros, basta coger los carteles del año anterior y del otro y del otro y del otro y... Y apañados. Eso sí, sin que se nos vaya a ir de las manos lo de yo pongo a este, porque así me ponen al mío, le compro dos corridas y yo coloco tres. Todo muy profesional y teniendo en cuenta el gusto del aficionado.

Si hay ferias en las que es tan descarado esto del corta y pega y la devolución de favores, que hay plazas en las que no se respeta ni eso de darle una oportunidad al torero local. Aunque hay veces que se agradecería que se pasara por alto este uso y si no, vean lo de El Soro y Valencia. Pero tranquilos, siempre saltará el vocero oficialista que motu proprio o por iniciativa del vocal de la empresa, se deshará en halagos y concluirá con eso de “los carteles redondos”, también llamados “bien remataos”. Siempre encuentran coartadas para justificar esta pantomima. Para lo que no tienen tanta palabrería es para aclarar por qué no están ganaderías como Cuadri, triunfador indiscutible años pasados, o cualquier otro hierro que aún es capaz de engrandecer la Fiesta. Te dicen que con estas ganaderías la plaza no se llena. Que igual no se llenó en su día, pero después de lo ocurrido aquella tarde de triunfo del toro, me extrañaría mucho que acudiera el aficionado si el nombre de Herederos de Celestino Cuadri volviera a encabezar la terna.

Le damos vueltas y más vueltas a eso de las presentaciones de los carteles, buscamos tres pies al gato, la cuadratura del círculo y así demostramos que somos unos hachas en esto de los toros. Y no te digo nada, si además hemos tenido la fortuna de que nos llegara un soplo sobre la elección de tal cuál toro o de la negativa de un espada a ponerse delante de unos o al lado de otros. Entonces ya eres firme candidato a que te pongan una calle. Se aprovecha la inercia de una tradición o la historia de una plaza. Si Valencia es plaza de primera, ya puede asomar el Chino Torero, que la feria será la más rematada de los últimos lustros. Lo de Bilbao o Pamplona siempre garantiza el toro, aunque este se haya exiliado de esos cosos hace años. Sevilla y Madrid no permiten la menor duda; a nadie le importa que ambas plazas se hayan convertido en una juerga pancista expendedora de despojos a troche y moche. Ya me veo a los espadas al lado del burladero de matadores echando unas moneditas en una máquina y una vez que esta vomite el producto solicitado, escuchar eso de “sus orejas, gracias”.

Se imaginan que volvieran aquellos tiempos en que el aficionado a los toros estaba ansioso por conocer los carteles de la feria de su pueblo o de las ferias de las plazas importantes, ya fuera para ver si había posibilidad de organizar una excursión para ver in situ a su ídolo o en último caso para estar al tanto para ver las corridas por televisión, cuando la tele retransmitía lo mejor y no absolutamente todo. La ilusión competía con la incertidumbre, cuántas tardes se apuntaría cada figura a la feria, con qué ganado y con qué compañeros de cartel. Una incógnita que aún desvelada, no dejaba de sorprender y cuando la realidad podía superar cualquier idea preconcebida de ese ansioso aficionado a los toros. Los empresarios, siempre expectantes y al tanto de la vida del toro, recogían los guantes que se lanzaban entre las figuras, manteniendo en la cumbre esa competencia tan necesaria y fructífera para la Fiesta. ¡Qué bueno! Ponían juntos a dos toreros que el año anterior se las tuvieron tiesas durante toda la temporada, ¡y dos tardes! Una con el ganado elegido por un matador y la otra con los toros preferidos del otro. ¡Caramba! Pero no creo que nuestros cuerpos serranos vuelvan a vivir días como aquellos; eso sí, siempre habrá quién le eche redaños y lo de los carteles le dé juego para prepararse una buena charla para el bar.


Enlace programa Tendido de Sol del 1 de febrero de 2016:
http://www.ivoox.com/tendido-sol-1-feb-audios-mp3_rf_10271997_1.html

4 comentarios:

MARIN dijo...

Enrique:
Vuelvo después de mi "desconexion" de finales de enero. Te podría decir lo mismo que te he dicho mil veces sobre la confección de carteles, pero me ahorraría trabajo con un corta pega de comentarios anteriores. Pa mi que este año vamos a tener a Lopez Simon y Roca Rey hasta en los Kinder sorpresa. Que me apetece verlos a los dos la verdad, pero incluidos en carteles con los otros, que a lo mejor muchos se apretarían los machos. Lo del Soro...pues que quieres que te diga, que me hubiese gustado ver al maestro hasta que el quisiera retirarse, pero no en estas condiciones. En las condiciones físicas que esta el maestro, para mi es casi una casi de irresponsables el anunciarlo.

No se te ocurra nombrar a los de mi pueblo en los carteles de Fallas, no vaya a ser que cualquier figura se confunda de día y cuando llegue al patio de cuadrillas se los encuentre enchiquerados. Además, sería quitarle "categoría" a los carteles de Fallas. Por cierto, hace dos años, tres cuartos de plaza largos en la feria de Julio y tras la lidia de Trastero por Rafaelillo la plaza entera ovacionando al ganadero. Ya sabes, al año siguiente el empresario de agte le dejó la corrida colgada en la finca. Rezemos porque cumpla su palabra para este año en Julio, que yo todavía tengo mis dudas.

Un abrazo Enrique.

Eugenio Vidal dijo...

Ponce,finito,urdiales.lleno total
Soro,catella,Roca rey.lleno total
Manzanares,Roman,L.Simon.lleno total
Paquirri,Cayetano,J.Duque.lleno totl
Juli,Rafaelillo,Ureña.Con Cuadris.
Fallas 2017.
Con estos carteles yo no dudaría en sacarme el abono y son más o menos los mismos nombres que las fallas de este año pero combinados de otra manera.
Los mano a mano,fuera porque no tienen ningún interés y además quitan el sitio para poder ver a otro torero.Es mi opinión.
Un saludo Enrique.

Enrique Martín dijo...

Marín:

A lo de ver a los dos chavales con otros compañeros, yo añadiría además que fuera con ganado que les pudiera dar posibilidades de demostrar todo lo que pueden dar de si. De lo del Soro, pues ya está dicho todo. Y de los negros y algún colorado triguereños, pues eso, si triunfan y al año siguiente te pones a jugar a hacer juegos de manos, a ver dónde está la bolita, pues lo que quiere decir es que no quieres que vuelvan, quizá porque en esa tarde inolvidable y sin pretenderlo, dejaron con el culo al aire a muchos.
Un abrazo

Enrique Martín dijo...

Eugenio Vidal:
Queda clara su opinión y sus opciones de carteles. Incluso haciendo nuevas combinaciones, a mí personalmente, no acaban de convencerme, quizá a excepción del último, que no tanto por la terna, que por el ganado. Apareciendo el toro, sean los que sean los anunciados, adquieren valor y nos obligan a mostrar nuestros respetos.
Un saludo Eugenio.