martes, 28 de junio de 2016

José Tomás, ni sí, ni no, ni lo contrario

El enigma José Tomás; o será todo más simple de lo que pensamos


Se me hace raro tener que empezar afirmando que José Tomás ha sido un torero único, muy por encima de cualquiera de los que ahora calzan las rosadas, ya sean los genios que paran relojes, los que componen como querubines táuricos, los dominadores de caracoles, los maestros que no aguantan un juicio medianamente serio, como las nuevas generaciones que dicen que son el relevo de no sé qué historias. Baste una tanda de aquellas que dio su penúltima tarde en Madrid y se acabó el carbón. Luego vino la retirada y todo quedó en el limbo, las esperanzas de que llegara un torero y pusiera esto patas arriba, de que un tío de verdad descubriera de una vez a tanto “hartista” cultivador del hartazgo y la mentira esparciendo la trampa y el fraude allá por dónde merodean sin nocturnidad, pero con una alevosía que ofende.

Aquella decisión podía ser comentada, discutida, no entendida y hasta cuestionable, pero necesariamente debía ser respetada. Tras tener que aguantar ataques de todo tipo por parte de los taurinos que no consiguieron doblegarle, incluso llegando a cuestionar su condición sexual, que si era un pesetero, que si un cobarde por no dejarse televisar, que si era mal torero porque le cogían los toros, que si un suicida y lo que no imaginan, se despidió con un “ahí os quedáis con vuestra pantomima”. Hasta se puede llegar a comprender, pero... nos hacía tanta falta José Tomás. Luego que si volvía, que si no y lo de Aguascalientes que parecía ser el definitivo punto y final. Una tarde aquí, otra allí y con eso él mataba el gusanillo y los más fieles su bolsillo. Demasiado poco como para considerar que esas apariciones pudieran considerarse una vuelta del torero, a pesar de que algunos adelantados se tomaran aquello como que rehuía el enfrentamiento con la legión pegapasista al completo por temor a perder la partida y que no quería asomar por las plazas de primera, sin contar con que estas estaban en manos de lo más granado de la caterva taurina que maneja todo esto.

Pero ahora parece como si hubiera decidido volver a empezar como en un punto y seguido a partir de lo de Aguascalientes, aunque en esta ocasión la salida tuvo lugar en la Monumental del DF. Lo que está viniendo después no sé si se puede considerar hacer temporada o no, plazas de segunda, con el riesgo de fracaso más medido, anunciándose de una en una, como si fuera midiendo los efectos de apuntarse a un cartel en tal o cual plaza. Jerez vendido, Alicante vendido, San Sebastián vendido, Huelva y así va haciendo camino. Estaría bien que esto fuera el preludio, el calentamiento, el irse placeando y cogiendo sitio para la temporada próxima. ¿Se imaginan? No sé si lo conseguirán, pero que es absolutamente necesario no cabe la menor duda. Estaría bien comprobar si a los Morante, Juli, Castella, Perera, Roca Rey, López Simón o Manzanares se les saltan los remaches por la presión del de Galapagar, pero... ¿Ustedes lo ven esto factible?


Sinceramente no veo yo a José Tomás compitiendo con nadie, más bien le veo yendo a lo suyo y punto. No me lo imagino yo echando un cuarto a espadas en Sevilla y Madrid, luego en Pamplona y Bilbao, Málaga y de nuevo en Madrid en Otoño y en Sevilla en San Miguel. Estaría bien, ¿verdad? Aunque la cuestión no es que a servidor le apetezca o no ver a uno de los últimos que le pusieron los pelos de punta en una plaza de toros, la cosa va mucho más lejos. El que la fiesta de los toros no vive sus mejores días está más que claro; son múltiples los ataques que llegan desde dentro y desde fuera, por parte de la élite taurina preocupada única y exclusivamente por su negocio sin importarle lo que dejen atrás y por esos movimientos respaldados económicamente por supuestos lobbies animalistas, que luchan contra las supuestas subvenciones a los toros, mientras que reciben dinero por mantener encendida la llama del antitaurinismo. Movimientos de los que yo no acabo de ver con claridad sus objetivos finales; dicen que acabar con la barbarie que supone este rito, pero algo dentro de mí me dice que el fin último obedece a otras circunstancias que en la actualidad se nos escapan. Pero bueno este es otro cantar, aunque estoy convencido que un José Tomás beligerante se lo pondría mucho más difícil a esta panda, a los taurinos y a los antitaurinos. ¿Por qué? Muy sencillo, porque la mejor forma de explicar lo que es esto y la vía más rápida para captar adhesiones no es otra que mostrarlo tal cómo es, con el toro íntegro y el toreo verdadero. Lo digo absolutamente convencido, ante eso es complicado que alguien consiga abstraerse, da lo mismo que sea de Utrera, que de Alba de Tormes, Galapagar, Madrid, Sevilla o Toronto y alrededores. Y es que así es la fuerza de los toros. La cuestión es que se empeñan en ocultar esta verdad, la disfrazas para proteger a los mediocres, la disfrazan para arrebañar cuatro duros cuando podían hacer se de oro y el que podría echar esto para adelante se empeña en mantenerse en la sombra. Que no digo yo que ceda ante la tiranía del Plus, pero, ¿no hay otras fórmulas? ¿No hay otras televisiones? Yo respeto mucho todas las posturas, pero lo que no me pueden pedir es que me convenza de que lo más conveniente es continuar en eso de José Tomás, ni sí, ni no, ni lo contrario.

10 comentarios:

MARIN dijo...

Enrique, sabes de sobra que lo único que me anima a comentar o decir algo últimamente es el de Galapagar. Normal, soy tomasista. Y además, tomasista convencido.
Este ha conseguido lo que otros muchos jamás conseguirán: Torear cuando quiere, donde quiere, con quien quiere y lo que quiere. Su sangre y verdad le ha costado. No le hace falta televisión que lo retransmita ni le baile el agua. El ponerse en el sitio donde los toros hieren y torear ahí le basta y le sobra. El no pisar las plazas grande puede ser como bien dices porque estas están en manos de de quien están, de gente que va a otro rollo muy distinto a lo de el.
En Huelva, que es lo que mas me toca de cerca, si pudiésemos juntar dos plazas, dos plazas que llenaría, mientras otros no llegan a los tres cuartos entre los tres. Por algo será. Y será porque la EMOCIÓN del toreo no se mide en cantidad de tardes ni en cantidad de trapazos, sino en jugarse la vida creando arte. Si hubiese cinco como este, ni animalistas ni ostias. Esos si, le pido como a todos los demás: La apuesta por el toro y la variedad de encastes, que todo no va a ser dar coba oiga.

Un abrazo.

Administrador dijo...

Estimado Enrique : Me comentaba una persona muy allegada y que ha tenido un papel destacado en su carrera que Jose Tomas no puede entrar en pelea con los toreros de hoy ni torear 40 o 50 corridas por una unica razon, sus facultades estan mermadas, su pierna no esta para esos esfuerzos, la cornada de Aguascalientes ha dejado secuelas irreversibles a nivel circulatorio, es mas 15 dias antes de las tres cuatro o cinco corridas programadas porque mas no puede le tienen que suspender el medicamento anticoagulante Syntron. Desgraciadamente es asi. Un saludo y felicidades por su blogs

Anónimo dijo...

Enrique, como bien dices, yo estoy en la teoría de que José Tomás está a lo suyo y punto. Lo único que le pediría es volver a Las Ventas una última vez, por aquello de repetir aquellas dos tardes del 2008. Mis noticias son que, mientras siga esta empresa, no volverá a torear aquí.

Desconozco los hechos que detalla el post anterior sobre el Syntron. Más allá de ese problema, lo de aparecer poco ya lo venía haciendo incluso antes de la grave cornada de Aguascaliente. Simplemente...está a lo suyo.

Un abrazo
J.Carlos

fabad dijo...

No se le puede pedir lo que podría dar t arreglar esto. Su salud no se lo permite y ante eso no podemos pedir nada. Ojalá pudiéramos

Antonio Fernández Box dijo...

Enrique, no puedo ser imparcial al hablar de este Torero, pues me pasa como a Marín, lo que si te digo es que si algo le ha caracterizado a lo largo de su carrera ha sido la coherencia, virtud por otra parte escasa en esta sociedad actual, pues Yo veo que no podemos pedirle ahora que compita con otras Figuras si desde el principio su competencia ha sido con él mismo buscando la perfección en su Toreo,
por otra parte hay toreros que según en la plaza que toreen así hacen un tipo de toreo, mas efectista si el público es festivo, o menos ventajoso si hay mas exigencia, cosa por otra parte injusta porque en Murcia pagamos nuestra localidad igual que en Madrid, pero Yo personalmente las veces que lo he visto ha toreado con la misma entrega en Murcia o en Madrid, aunque eso sí, no con el mismo tipo de Toro.
También hay que tener en cuenta lo que tú comentas en cuanto a que ha sido un antisistema con el empresariado que hoy maneja esto en las plazas importantes por lo que dudo que con sus honorarios actuales llegue a entenderse con los mismos.
Por último creo que físicamente debido a las secuelas de su cornada y también por que no, debido a su edad, no creo que pueda ni deba llevar a cabo lo que tú planteas.
Te tengo que felicitar por llevar al programa invitados como D.Mariano Cifuentes, un verdadero manantial de Afición.
un abrazo.



Enrique Martín dijo...

Marín:
Pues ya ves, hace lo que se ha hecho siempre, toreo cómo siempre se ha pensado que había que torear y la respuesta de esos que mandan, los que llevan a una banda, más que a toreros de verdad, no tienen otro recurso que decir que es un loco, un suicida. Pues hala, que sigan con lo suyo. Y tú, pues que puedas tener la oportunidad de verle en la plaza.
Un abrazo

Enrique Martín dijo...

Administrador:
Primero, muchas gracias. Tampoco creo que haga falta que toree tantas tardes, igual con 15 ya sería suficiente. Y esos problemas de salud pueden ser los causantes de esta minigira, dando la sensación de que se está probando. O igual es que algunos nos queremos agarrar a cualquier asomo de esperanza.
Un abrazo

Enrique Martín dijo...

J. Carlos:
Pues parece ser que algo hay en lo de la empresa de Madrid, pero yo todavía tengo la ilusión de volver a verlo de nuevo en Madrid, aunque solo sea para cortarse la coleta.
Un abrazo

Enrique Martín dijo...

Fabad:
Así es, pero quizá sea el único que podría dar un empujón a esto.
Un abrazo

Enrique Martín dijo...

Antonio:
Muchas gracias por tus felicitaciones y por estar ahí escuchándonos. Son muchas las circunstancias que acompañan a José Tomás, pero lo que está claro es que ha sido el único que ha unido a los aficionados y con el tiempo que lleva apartado, a pesar de esas leves apariciones, aún es capaz de hacernos creer y querer volver a verle torear.
Un abrazo