miércoles, 15 de julio de 2015

La vergüenza también llegó a Pamplona

La feria del toro, ¿se acuerdan?


Si decimos Pamplona, inmediatamente al aficionado y no tan aficionado a la Fiesta se le viene la imagen del toro, para después asomar a la mente los encierros, los guiris “condecorados” con un puntazo o una cornada que mostrarán orgullosos en su tierra, lo que les convierte en dignos sucesores de don Ernesto; algunos de no tan lejanas tierras, puede que escuchen Pamplona, San Fermín y recuerden aquellos madrugones de la mano de sus padres para ver los encierros, pero siempre con la dignidad y seriedad que impone el toro, un símbolo que ha hecho que la capital navarra sea conocida en el mundo entero. ¡Qué orgullo! Luego el tiempo y la ignorancia es la que ha pretendido convertir la locura en emblema de estas fiestas, como si todo sobrepasar los límites, lo mismo en la calle, saltando desde la Fuente de la Navarrería, que en la plaza, convirtiendo el sol en un magno botellón ajeno a lo que pase en el ruedo. No sé si esto será o no parte de la fiesta, no quiero ni entrar en ello, pues soy ajeno a todo esto y ni debo, ni me atrevo a juzgar; a través de la tele pocas conclusiones razonadas se pueden obtener. Pero sí que me gustaría detenerme en lo ocurrido en el ruedo, a cargo de los “profesionales” del toro,

Ni tan siquiera me detendré en ese señor que desnudo de medio cuerpo se paseó con un mensaje pintado en el pecho. Por supuesto que no comparto ni su actitud, ni el mensaje, pero bueno, se supone que él y todos los que piensan como él, lo que pretenden es atacar y desprestigiar los toros, queriendo demostrar constantemente las carencias y ataques a la dignidad del toro que ellos creen que se producen durante la corrida. Puede que no sea posible ni discutir con ellos sobre esto del toro, ni por supuesto nos permitirán poner sobre la mesa nuestros argumentos. En el mejor de los caso, siendo muy optimistas, igual se llega al acuerdo de que no habrá acuerdo. Ya es algo. Pero, ¿qué hacemos con los furibundos ataques que llegan desde nuestro lado? O al menos eso pensamos muchos, que algunos que incluso viven del toro, están de nuestro lado. Nada más lejos de la realidad. Seguro que el que más y el que menos ha podido ver una foto de un toro de Garcigrande, lidiado en estos sanfermines de 2015, en el que el animal aparece con un pitón triturado, como si fuera un escobón y con el otro con la vaina sacada, o esa en la que el torero, El Juli, ante el mismo animal, se le ve poniendo caras, como si estuviera enfrentándose al Minotauro del laberinto.

Quizá alguno de los que estén leyendo estas líneas sean capaces de explicar medio decentemente esta imagen, puede que hasta lleguen a encontrar una justificación medio aceptable, pero lo veo difícil; o igual no es tan complicado, porque ya se sabe que hay gente pa’to, incluso los habrá que se escandalicen con la fotito, pero que al tiempo admitan lo de las fundas, pero de lo que no me cabe ninguna duda es de que lo que me cuenten tenga una gota de honradez y honestidad con la Fiesta de los Toros. Pónganse delante de esta imagen y cuéntenme que las fundas son necesarias para evitarle al ganadero pérdidas económicas y que estas no afectan negativamente durante la lidia. O si lo prefieren, explíquenme que este señor que se viste de torero y todos los demás que alimentan esta vergüenza, son grandes figuras del toreo, que son el summun de la tauromaquia y que constituyen la quinta esencia del toreo. Díganmelo. Hasta podemos dejar a un lado lo de los retorcimientos, trucos tramposos, robos de dos tercios de la lidia y alguna cosita más que hacen especialmente indigno este espectáculo. Las orejas benévolas, los triunfalismos, los indultos inexplicables, la falta de casta y todo eso que realmente ataca las bases del toreo, se quedan en nada ante esta vergüenza, la que supone denigrar la imagen del toro de lidia hasta estos límites. Ya ven, señores antitaurinos, les actualizamos su banco de imágenes con fotografías vergonzantes, sin que se tengan que ir a rebuscar a las hemerotecas. Aquí tienen dos de especial valor, donde pueden apreciar en lo que se ha convertido el toro en lo que siempre se ha llamado “la Feria del Toro” y a lo que se dedica uno de los máximos exponentes de la tauromaquia actual.

Me dirán que también ha habido imágenes que dicen todo lo contrario, como las del día de los escolares, Miura o el Conde de la Maza; por supuesto, pero es tanto el daño que provocan las otras, son tantas las facilidades que se le dan a los que no quieren ver esto ni en pintura, que esas pasan casi desapercibidas para el gran público, aunque los aficionados se recreen y se estremezcan contemplando al toro. Habrá muchas cosas que puedan parecer escandalosas en los sanfermimes, seguro, pero ninguna hará tanto daño a la fiesta de los toros, como estas en las que el toro parece un ser maltratado. Sí, sí, den todas las explicaciones que crean convenientes, pero el mal ya está hecho y aunque convenzan a los taurinos, a esos que no llegan a matadores de toros, que simplemente se tienen que conformar con ser profesionales, no conseguirán que a los demás les llegue ningún mensaje positivo. ¡Qué pena! ¿Por esto quieren echar al aficionado? ¿Para cantar estas barbaridades sin complejos quieren callar las voces críticas? Esto se nos va y si nos quedaba alguna duda, ahora ya sabemos que la vergüenza también llegó a Pamplona.


PD.: Y ya si quieren, pueden ponerse de nuevo la montera y dejar de hacer el ridículo con gestos que ustedes mismos se empeñan en vaciar de todo posible significado.

10 comentarios:

franmmartin dijo...

He escrito dos comentarios sobre "lo" de Pamplona a dos distintos Cuadernos -uno de ellos para la crónica de nuestro amigo Malagueto en lo de Hervás- y los he borrado antes de enviar.
Corren muy malos tiempos para el sentido común y no merece la pena,por el momento para mí, pleitear ni patalear ante una situación final:Es como si tienes a alguien querido con una enfermedad terminal y quieres revivirlo denostando la causa de esa situación. Al final se muere como se ha muerto la Fiesta de los Toros,que no en Pamplona ,sino hace muchos años.
Siempre han existido en la Historia de la Fiesta los granujas y los sinverguenzas,las figuras y sus alivios e imposiciones,los ganaduros y los Empresarios usureros e informales.Pero existía un contrapeso que limitaba toda esa mierda inherente al ser humano.Ese contrapeso se componía de muchos y variados sumandos que no es momento de examinar aquí.
Uno de esos y principales sumandos era el aficionado,al que en general se le respetaba y hasta se le temía.Posiblemente no era un aficionado ecuánime y justísimo,pero era un enamorado de la gallardía ,del valor y del compromiso de los coletas.
Hoy con las técnicas de mercadotecnia y psicología de masas.Con lo que saben todos esos mamoncillos sobre manejo de bípedos implumes ,no es necesario prohibir nada para que desaparezca.
En Sevilla nadie se va a atrever,espero, a prohibir la Semana Santa.Es más sencillo ir aburriendo a los fieles,propiciar la masificación,promover algunas algaradas en la "madrugá" , llenar las cofradías de dirigentes soberbios y vanidosos,quitarle su sentido esencialmente religioso y llenar los tramos de nazarenos-espectadores en las Plazas de Toros-de gente de aluvión , mucho más preocupados por la vanidad y la "estética" que por lo que allí se conmemora.
Sabes que hace tiempo que tengo un pié fuera de lo que más me gusta.Que ejerzo de agorero,pero te aseguro ,que al igual que nuestro amigo Marín , he vuelto la espalda a toda esta podredumbre y que con su pan se lo coman-que la mierda con pan entra.
No he visto una sola corrida entera de San Isidro,ni ninguna de Pamplona,ni espero ver ninguna en mucho tiempo.Que les aproveche.
Todo esto respetando,faltaría más, a los que disfrutan con esta fruta averiada y a los que la proclaman como manjar celestial.
Están en su derecho de disfrutar con esto-hay gustos para todo-pero no de predicarla como lo mejor de todos los tiempos.Gente que lo más cornudo que ha visto es al marido de la penúltima estrella del star system.
Que les aproveche.
Un abrazo,amigo.

P.D. Ni me manifiesto sobre los figuras,ni ganaderos ni de nadie,porque me dan un asco insuperable.

Anónimo dijo...

"Alfileres de Colores"

Cuando al vuelo tu capote pinta verónicas al trote del toro en el redondel,
parece la Maestranza una academia de danza o un cortijo de Jerez.
Saludos...Aquí vengo a aportar mi granito, en esta vida todas las cosas tienen su porqué, la razón fundamental de ser para las fundas es que vivimos en el siglo XXI, la sociedad va incorporando adelantos domesticos a los que no podemos renunciar, ¿¿ acaso la penicilina desvirtua la Lidia de un toro?? cabria pensar debido a que un torero afronta una posible cogida con un supuesto "escudo" Cuando la aguja del toro pinta el traje grana y oro como ensartando un clavel,
en tus brazos soñadores
alfileres de colores
"¡ole !" quieren coser.
No nos engañemos, a lo largo de la historia La fiesta ha ido incorporando todo tipo avances en aras de la comodidad-economia,unas veces,o de la simple supervivencia en otras...antaño se trasladaba una corrida a pie por cañadas de transhumancia, segun José Maria de Cossío se tardaba en llegar a Madrid desde las dehesas andaluzas , un mes; al Norte dos; de la marisma a San Sebastian, tres meses. Imprescindibles para ello los cabestros "obedientes e inteligentes".
Despues se idearon los cajones y hoy los toros viajan encajonados por autopista y nadie ha dicho nada del daño psicologico que sin duda ocasionará en el astado la claustrofobia y el agobio de semejante rapto.Qué diremos de la evolución del tercio de varas...pienso que hoy en dia ni los más rancios aficionados soportarian la carniceria de los pencos destripados, llegó el peto...llego ese percherón de setecientos kilos...y el tercio de varas hoy es lo que todos sabemos, un toro que se estrella contra un monolito, tanque de gutapercha, donde se le pega en forma y cuanto mas bravo mas se le destroza, por el abuso de poder del picador parapetado een su penco blindado.

"..La mayor parte de los fabulosos toros antiguos ( ¡¡ya era hora de decirlo ¡¡) toros que recargaban en varas, excitados por la facilidad de las cornadas y la sangre a raudales, en cuanto les pegaban de verdad se refugiaban en tablas y agonizaban, tardos y probones. Toros "destripadores de caballos" con siete y ocho y nueve cabalos desventrados he visto, y el lector de mi edad puede ser testigo de cargo, acabar aconchados, huidos sin ganas de embestir. Como decia Manolete ¿ cuando han visto los aficionados antiguos toros que aguanten cien pases de muleta?
"El Toro Bravo" Alvaro Domec y Diez.
Asi pues, muchas son las innovaciones que la tauromaquia ha ido asumiendo a lo largo de la historia "paso a paso, lo que era impensable se convierte en inevitable".Los mismos toros de José Escolar aparecen en fotos enfundados y no dieron esa imagen patetica del escobillado, será cuestión de manejo inadecuado Como mimbre canastero
se mece tu cuerpo entero
mientras pasa el burel.
Y el vuelo de tu muleta
es el verso de un poeta
que quiere al cielo embeber.
Sea como fuere, negros nubarrones acechan dentro y fuera del orbe taurino, sin duda es esta una epoca de cambios sociales y culturales, personalmente tengo mucha curiosidad por saber a donde iremos a parar.
Que es de bronce la escultura
del toro por la cintura
y tu muñeca un cincel.
En tus brazos soñadores
alfileres de colores
"¡ole !" quieren coser.

música de Diego Carrasco - Letra de Pedro Rivera.
Interpretada por Miguel Poveda


Fdo. Ängel






















Unknown dijo...

Una mentira repetida se convierta en verdad,esto es lo que pasa con la fieta,maldita palabra ,ya no vamos a una corrida de toros ,vamos a la fiesta de san.......y alli destorean los de siempre,la mentira tantas veces vista se convierte en realidad , esto es lo que hay,pero para una feria de 7 dias no nos vamos a arriegar a perder dinero,maldita palabra, pero es la verdad,ellos lo saben y se aprovechan. Pero cuando sale el toro ellos no estan, estan los toreros que saben lidiar, apechugar con los marrajos y por supueto torear.asi se acaba con los toros y viene la fiesta....

Enrique Martín dijo...

Franmartín:
Muchas gracias por asomarte a este espacio y decidirte a dejarme tus reflexiones. No se puede pedir más. Sobre todo lo dicho por ti solo puedo estar de acuerdo en ese vaciado de contenidos, en mutilar la esencia y "adecuarlo" a las masas ignorantes, que es otro error muy generalizado, el pensar que el ser humano se junta con veinte más y se atonta. Igual no son las masas, lo mismo es el no querer que la gente sepa, que es mejor mantener la ignorancia, que promover el saber. Luego habrá quienes vayan contra estos fundamentos vacíos, que ataquen el todo y nos molestará.
En fin, que este irse apagando aún nos dejará muchas sorpresas y no creo que haya muchas agradables, más bien todo lo contrario.
Un abrazo

Enrique Martín dijo...

Ángel:
No acabo de ver claras las comparaciones entre unas cosas y otras, porque lo primero que se le atribuyen a las fundas es que tengan un beneficio cierto en la lidia. Si acaso, el que los señores ganaderos no tengan pérdidas, pero eso no debe ser cosa del aficionado. Es más, con las fundas hay una serie de inconvenientes añadidos que las hacen poco recomendables a ojos del que paga. Primero un exceso de manejo innecesario, que perfectamente podría evitarse. En segundo lugar, no parece que la resistencia y salubridad de los pitones sea igual con fundas, que sin ellas. Y en tercer lugar, esta operación es una suerte de afeitado del toro, que evidentemente no medirá igual con ellas, que sin ellas. Pero vamos, que seguro que no le descubro nada, porque esto es de sobra conocido.
Un saludo y gracias por su comentario

Enrique Martín dijo...

Ángel Jiménez Torres:
Y si a eso se le añade que lo importante es divertirse, disfrutar de los bares, la alegría, el triunfalismo y las orejas a docenas, pues ya ve, entonces tenemos lo que tenemos. Pero no quiero todavía recordarle más todo el veneno que se esta llevando esta Fiesta, que no verbena, por delante: Esto se nos acaba, si es que, como dice Franmartín, no se ha acabado ya. Yo me inclino más por esta idea.
Un saludo

MARIN dijo...

Enrique:
Lo de Pamplona era solo cuestión de tiempo que cayese. Como han caído también Bilbao o Madrid, donde el toro era protagonista. Mas si cabe el caso de Pamplona, donde realmente en los tendidos de media plaza lo que interesa durante la tarde es la sangría y no lo que sucede en el ruedo. Donde el encierro es lo que vende y no la corrida de toros (lícito por supuesto), pero es un caldo de cultivo para que las marrullerías del lobby taurino puedan crecer sin que nadie se queje lo mas mínimo.

Me pasa como a Paco, que no he visto nada de Pamplona. Miento, tres toros de Miura, y porque quería ver a Escribano y el momento de Salvador Cortés. Entremedio me tuve que tragar a Bolivar, y al final me reafirmé de que Salvador Cortés sigue igual. Pero es que nada de esto me interesa, y menos cuando un señor se está jugando la vida y hay media plaza cantando la chica yeyé. Que yo conozco a uno que, en mitad de la faena de muleta ante un novillo, dejó de torear porque la banda de música empezó a tocar Paquito el Chocolatero para deleite del tendido.

No me interesa esto Enrique. No me llena. Yo respeto al que quiera tragar con todo esto, pero, como habrás podido comprobar, ni escribo ni lo que es peor, ni visito a mis amigos que si lo hacen. Hasta tal punto llega mi hastío. Incluso me parece estar escribiendo sin llegar a decir nada en concreto, porque realmente no sé si hay mucho que decir.

En fin, que perdoname de nuevo por el chapazo. La pena que me queda es de tirar la toalla sin haber llegado a ser un aficionado y haberme quedado en solo un aspirante.

Un abrazo y perdona por la tardanza.

Anónimo dijo...

Buenos dias señor Martin, le he leido el articulo, un matiz. La vergüenza llego a Pamplona hace ya unos añicos, lo menos 6. Si es verdad la leyenda urbana esta de que les dan algo a los toricos para que el encierro sea como es ahora, pues....... ya ve que corridas de toros de mierda. En mi vida he visto orinar tanto a los toros de lidia como en Pamplona. Y los pitones de los toros de Miura, como autenticas brochas. Lo del mito de la feria del toro es pura arrogancia y propaganda. Al Jli le llevan soportando sus mariconadas unos cuantos años ya. Finito de Sabadel el año pasado, torreherberos-Torremierdilla, los Tufillos, etc etc etc. Y le dire de paso que el dia del esperpento final del Juli, familia mia estubo en los toros y se lo pasaron teta, hasta alguno me decia que fue mejor que la de Escolar, por aquello de que los toros iban al trapo. !!!HAY QUE JODERSE!!!!, y de los pitones, pues ya se fijaron, pero sin darle importancia, como si fuera lo mas normal del mundo.
Tengo oido que en Tafalla, pretenden poner las rayas de picar tipo Franzia, hojala salga todo bien y vaya la gente, y que le den mucho por saco a Pamplona citi. La Meca se baja los pantalones hasta los tobillos. Haber que toros traen el año que viene.
Un saludo señor Martin,desde luego que ganas para el optimismo no dan. Yo estos años despues de la puta mierda de San Femin me piraba a Orthez, y la verdad es que venia con las pilas recargadas.
Kaparra

Enrique Martín dijo...

Marín:
¿Qué no dice nada? Mucho dices, demasiado, que ya me gustaría que tuvieras mucho menos que decir, pero desgraciadamente hay mucha tela que cortar. Bastante es lo que cuentas, bastante. Que están consiguiendo echar a los más entregados a esto, que les sobran, que no los quieren porque les complican la existencia. Pero la pena es que estos que les sobran, los que se dicen aspirantes a aficionados porque quieren más y más y nunca ven saciado su sed de toros, son los que pueden mantener esto vivio. Los de la chica yeye, los bocatas y las pipas, en cuanto encuentren otro divertimento más al sol o a la sombra, depende las fechas, saldrán haciendo fu como el gato. Y entonces, ¿quién quedará?
Un abrazo y ya te digo siempre que no llegas tarde, que siempre apareces a tiempo.

Enrique Martín dijo...

Kaparra:
Esa es la plaza que querían y esa es la plaza que han conseguido. Llevamos años, como bien dices, que parece que Pamplona es el encierro y ya está, eso sí, cada vez más rápido, que parece que es lo que importa. El toro cada vez asoma menos, como en todas partes, pero claro, hay plazas en las que esto duele más. ¿Te imaginas que de repente hubiera sitios en los que empezaran a apostar por el toro de verdad, por la suerte de varas y por la lidia en orden? Qué bien suena, pero...
Un abrazo Kaparra y gracias por esa claridad.