viernes, 11 de septiembre de 2009

El natural, la verdad al natural

El natural no sé si definirlo como el rey de los lances, o el lance de los reyes, de los reyes del toreo, se entiende. Podría haber comenzado por los pases tradicionales con los que se inicia la faena de muleta, pero dados los tiempos que corren en los que escasea la verdad y la naturalidad, habrá que echar la “pata alante”, adelantar la muleta poniéndola plana y cogiéndola sólo un poquito más atrás del centro del palillo, tragar saliva y esperar la arrancada del toro para embarcar la embestida, correr la mano con mucho temple y rematar el pase detrás de la cadera, para quedar colocado para el siguiente lance.

Esto mismo se puede hacer dando el medio pecho, como lo hizo Antoñete, el Viti o Curro Romero, por ejemplo, o de frente dándole todas las ventajas al toro, igual que Pepe Luís y Manolo Vázquez o el mismísimo Paula aquella tarde de la feria de otoño de Madrid, rompiéndose por la mitad, mientras se resquebrajaba la plaza de emoción.

Luego ha habido especialistas en torear con la mano izquierda, especialistas como José Ignacio Sánchez, que nos duró muy poquito vestido de luces, o el Cid o José Tomás, quienes nos regalan sus mejores tardes cuando se les desentumece la zurda. Casualmente se da el caso de que los mejores “naturalistas” suelen ser unos fieles intérpretes del toreo clásico.

Pero incluso en el toreo al natural se puede incorporar alguna innovación, como lo hizo Joselito, José Miguel Arroyo, la tarde del 2 de mayo. Innovación y clasicismo unidos, porque realmente Joselito no inventaba nada cuando toreó al natural con la derecha tirando el estoque al suelo, pero que con su forma de hacer provocó una verdadera revolución.






Si habitualmente mis comentarios son la expresión de una forma personal de ver los toros, con mis recuerdos, mis sentimientos, mi utopía en tauromaquia y la fidelidad a lo que mi padre me fue inculcando desde que me llevaba a los toros en pañales, en esta ocasión es todavía mucho más personal si cabe. Por eso me encantaría que esta entrada la completaran los buenos aficionados que me siguen, que me consta que los hay muy buenos y además muy humildes, que incluso llegan a dudar de su sabiduría, lo que demuestra que la tienen, y que sean ellos los que a los demás nos hagan acordarnos de este y aquel torero y de esta y aquella tarde. ¡Va por ustedes!









2 comentarios:

Tercio de Pinceles dijo...

Estimado Enrique,

¡Menudo repaso de "naturalistas" como tú dices!.

Estoy completamente de acuerdo contigo, pues parece que, hay un miedo sobre el miedo al toro de tomar la muleta con la zurda. Y ya si, tarde y mal, lo hace un torero y el toro no da facilidades, para que quieres más.

Se entiende que la izquierda es una extremidad de poco uso, pero siempre se ha dicho que es la que "da los cortijos". Esperemos pacientemente un nuevo resurgir de "izquierdistas" (sin politizar, por favor).

Un abrazo, Luis.

falberto56@gmail.com dijo...

Sábios juízos e magníficos «apuntes». Saudações desde Portugal.