miércoles, 8 de junio de 2011

Jo… con la mano inocente

Habrá que esperar a Diego Urdiales con el toro toro.


Atribuyen a los competidores de El Guerra esa costumbre sólidamente establecida del sorteo de los toros. Costumbre regulada por el reglamento taurino y que nadie se atreve a discutir. Se hacen tantos lotes equilibrados, como matadores van a actuar en el festejo. A partir de ahí, la suerte y la decisión de una mano inocente marca el destino de cada matador. Y ahí es donde Diego Urdiales tiene un verdadero problema, en quién mete la mano en los sombreros y extrae al bolita con los números de los toros.

Ya son dos años en los que el riojano no puede mostrar su toreo y no se le puede achacar que no sea por falta de ganas, pero este torero tiene un curioso handicap, necesita el toro toro. Lo que en otro tiempo fue una virtud, hoy en día, en estos tiempos del medio toro, es un lastre. Es un inconveniente no poder torear a un torillo porque a la mínima se va al suelo, ni poder bajar la mano ni dar el pase completo, por el mismo motivo o porque el animal se larga a mitad del pase como si eso no fuera con él, renunciando a todo posible asomo de pelea. Da igual que se le deje ir a sus terrenos, a toriles, porque además la cosa se empezaba a hacer pesada.

Los de Los Bayones no aguantaban el inicio de faena del segundo de la tarde por abajo, ni los derechazos con mando a un toro solo preocupado de aguantarse en pie. Con el sobrero de Fraile Mazas, que agotó sus escasas fuerzas intentando saltar la barrera, se colocaba como no lo ha hecho casi nadie desde principios de mayo en esta plaza, le presentaba la muleta plana, con verdad, pero nada de nada. Es lo que tiene el medio toro, que hay que saberle hacer el medio toreo, el del pase lineal sin rematar, en el que el animalito solo tiene que ir y venir, mientras el de luces se retuerce en su jugo. Habrá que esperar otro momento en que alguien decida traer toros a Madrid y entonces llamamos a Diego Urdiales para que nos enseñe de lo que es capaz y se olvide de la frustración que provoca estrellarse contra un mulo.

Rafaelillo habría el cartel y aparte de no saber donde ubicarse durante la lidia, volvió a esa manía ya tan sobada de pasar a todos los toros como si fueran alimañas, lo que resulta un tanto anacrónico con estos medios toros. Su primero se aquerenció en una zona de la plaza que era un verdadero barrizal, donde se defendía sin entregarse en ningún momento. A este le recibió con verónicas muy pocos sosegadas y rectificando constantemente a cada lance. En su segundo llegamos a banderillas y aún nadie había fijado al toro, que andaba por allí como el que espera a una amiga en un parque, paseo para acá, caminata para allá, me quedo, me voy. El murciano tomó la muleta igual que podía haber cogido una bandera. Pases por alto, mantazos en la lejanía, el toro por el suelo, pico, contorsiones y el torillo por allí. No estuvo bien Rafaelillo, al que aunque él no lo crea, nadie quiere que le coja el toro, pero que no luce ante estos animalejos. Él necesita un oponente al que poder vencer y dominar, no estos sucedáneos de toro de Los Bayones.

El tercero, Matías Tejela, al contrario que sus compañeros de cartel, se maneja como nadie en esto del medio toro. Incluso puede llegar a convencer a alguien de que está haciendo el toreo ante un toro de verdad. Esto fue lo que pasó en su primero, al que no se le picó, se le enseñó el palo nada más, pero que el público quiso ver como un buen tercio de varas. Se aplaudió a un picador que hizo la carioca en la primera vara y que no apretó y tapó la salida en la salida. El madrileño recibió a este tercero con pases por ambos pitones, componiendo la figura, pero olvidándose de la utilidad del trapo, no vale solo con agitarlo como si fuera un guardiamarina. Con esa pierna bien retrasadita, con el pico de la muleta como el rey de la faena, con pases sin rematar jamás de los jamases, derechazos, naturales y toda suerte de trapazos, que a muchos engatusó como si estuviera toreando. Ya tenía la orejita en la mano, cuando se despachó con un bajonazo más que infame, que repitió una segunda vez por si alguien se hubiera despistado. Como se pone la gente por unos centímetros, entre treinta o cuarenta, de desviación, si en otras plazas esto mismo habría causado furor. Será esta una de las pocas cosas que distinguen a la plaza de Madrid. Al último inválido, un sobrero de Valdefresno, no le pudo ni destormar, si acaso haberle dado una aspirina para el reuma.

Del ganado poco bueno se puede decir, todos mulos, mansos, incluidos los dos sobreros, unos con aspecto de pelota gorda y corta, otro largo y asardinado, otro anovilladito, pero ninguno con pinta de toro de lidia. Flojos, no querían ni caballo, ni muleta. Y para uno que entraba al trapo, se fue a manos del que mejor destoreaba. Cosas de la fortuna y de una mano inocente que en algunos casos reparte suerte, como los niños de San Ildefonso, y en otros embadurna de mala suerte a su matador, a las cuadrillas y a todos los que están esperando ver a un torero delante de un toro. Habrá que cargarse paciencia y esperar. Lo malo es que son más los que consienten todo tipo de atropellos a figuras y ganadería modernista, pero que se ponen exigentes como el que más con el toro y toreros de verdad.

11 comentarios:

Scotty dijo...

Madre mia, vaya dos mulos!!pobre hombre, se le plantea una temporada muy muy dura..!!

lo cierto es que un muletazo de Diego vale por toda la faena de casi todo el escalafon, dio un par de naturales..eternos.

Vaya mierda lo de los bayones, mansos TODOS, no se pico al regular como bien dices.

Hoy me vuelve la ilusion, por Morante claro, al que llevo odiando desde el 15, pero asi soy de gilipoyas...!!

Ayer ademas casualidades de la vida estuve con el hablando un minutin y nos hicimos una foto que me hace mucha ilusion...

Saludos Enrique

Enrique Martín dijo...

Scotty:
No eres lo que aseguras, es que esto es ilusión y pocas cosas hay que despierte tanta como la del torero de uno, sin importar la edad.De eso se valen muchos de estos. Yo solo espero que salgan toros y entonces todo será más fácil, aunque en esta corrida el público siempre es diferente. Hoy van a ver a El Juli y algo a Morante, de Juan Mora no les sonará ni que es torero.
SObre Urdiales, pues tienes razón, con un muletazo ya borra a casi todos. Pero este año no se lo han puesto nada fácil.
Un saludo

Anónimo dijo...

Una vez más tengo que decir que me alegro de no haber pisado la plaza en un día tan aciago como el de ayer. Lo malo es que es el pan de cada día y, lo que es peor, sin que se atisbe una solución a corto-medio plazo.

Mis peores temores se han hecho realidad. Uno de mis toreros predilectos, Diego Urdiales, se ha estrellado en el ciclo ferial y otro menos predilecto pero que también, Rafaelillo, tres cuartos de lo mismo.

El fracaso de Rafaelillo puede deberse a un bajo momento de forma pero, en el caso de Urdiales, la culpa es enteramente suya por anunciarse con estos hierros. Es norma común que aquellos toreros que sobresalen un poco toreando las corridas duras, en seguida quieren salir del “circuito” y apuntarse a las que mata el resto del escalafón. Esto tiene sus consecuencias. Hay toreros que sólo lucen con el medio toro porque, cuando sale uno con codicia y medianamente encastado, les desborda. Otros, sólo lucen con el toro encastado y mucho me temo que es el caso de Diego Urdiales, aunque alguna vez se haya lucido en el “otro circuito”.

Saludos,
J.Carlos

Enrique Martín dijo...

J.Carlos:
No sé si él habrá elegido este ganado o no. Si así hubiera sido, creo que habría pagado su error con creces. Pero visto la poca fuerza que tiene entre los empresarios, prefiero dudar de que sea solo elección suya. Quizás la forma de sobresalir sea anunciándose con los del medio toro, pero con toros. Si no, tendría todas las de perder, porque igual que él se desnvuelve muy bien con el toro, aquellos están en su salsa con el borreguito.
Un saludo

Diego Cervera Garcia dijo...

Buenas tardes Señores, pues Enrique, que razón tienes una vez mas en tus comentarios con tanta sapiencia...
Es una verdadera lastima lo de Diego, y lo que no quiero imaginar es si a Diego lo hubiese tocado el toro que se le fue a Castella, del cual solo obtuvo un apendice... o el toro de Cesar Jimenimez, u otros tantos toros potables, (no encantastos) de la feria....
lo que esta claro es que estamos ante un gran torero con muy mala suerte en los sorteos.

Diego Cervera Garcia dijo...

Enrique, una vez mas, has descrito la corrida tal cual, sea la razón que sea, la verdad es que Diego Urdiales esta teniendo mala suerte, y como consecuencia, somos nosotros que estamos privados a no disfrutar de el.

Loly Medel dijo...

Sr.Enrique me parecen excelentes sus crónicas ,tanto en la forma como en el fondo. Mucho más extensas y certeras que casi todas las plumas de la prensa especializada
.
Me gusta leerle todos los dias y oirle en la radio algún que otro lunes en la emisora hispanidad junto a los aficionados andaluces

Respecto al gran torero riojano Diego Urdiales decirle que hay que tener un poco de paciencia, por que posee unas magnificas condiciones para destacarse del resto de compañeros del escalafón, por valor, por pureza,por verdad, etc. Madrid Ud lo sabe lo espera y lo desea,seguro que no esta lejos el dia grande de su consagración.

MARIN dijo...

Pues mira Enrique, me gusto el de los Bayones. Me refiero al tercero de la tarde, Garlitero creo que se llamaba. Si es cierto que se le dio poco en el caballo y que se le tapo la salida, pero me gusto la pelea del toro en el peto. Y despues me transmitió mucho en la muleta. El torero, con todos mis respetos, a coger el carreton con la paca o la pita y machacarlo a estoconazos.
Un saludo Enrique.

Enrique Martín dijo...

Diego:
Para mí Urdiales es de los toreros que ponen de acuerdo a todos los aficionados y a los que aspiramos a serlo. Eso sí, vamos a tener que pedirle que cambie al que escoge las bolitas. Pero bromas aparte, creo que podemso seguir esperando lo que haga falta.
Un saludo

Enrique Martín dijo...

Loly:
Muchas gracias por su fidelidad y por sus juicios. Lo únicop que pretendo es dar mi opinión y no apartarme de ella, no me gustaría, sea o no acertada. Sobre lo de la radio me da mucho pudor e incluso no lo había comentado en este blog, pero ya que me lo pone en suerte, pues sí, los lunes que los amigos de Hispanidad Radio lo consideren oportuno, allí estaré para dar mi opinión. Un lugar donde además me siento muy a gusto y muy arropado por aficionados cabales.
Sobre Urdiales no creo que pueda aportar mucho más a lo que comenta muy atinadamente. Si acaso yo diría que ya se condagró el día de aquel Samuel infame y la tarde de los Victorinos, pero si es verdad que creo que queda que nos de lo mejor, muchas más tardes.
Un saludo y muchas gracias.

Enrique Martín dijo...

Marín:
Ya lo hemos hablado en más de una ocasión, que está todo el d´´ia penando por un toro que embista claro y cuando les sale, lo desperdician y además desprecian la suerte suprema. Con lo bella, emocionante y verdadera que es.
Un abrazo
PD: Ya ves que lo que yo no me atrevo a escribir en el blog, lo hacen otras personas. Loly Medel se ha echado para adelante y me ha obligado a salir a torear a los medios. Así da gusto.