miércoles, 19 de septiembre de 2012

Expongo en Tamames, mi pueblo

Este remate de Pepín Martín Vázquez me acompañará con otros tantos a Tamames, un pueblo de Salamanca.



Alguna que otra vez, tirando de descaro, he traído por aquí a Tamames, un pueblo de la provincia de Salamanca en el que el toro es el dios de las dehesas, algo que se mantiene en el día a día de la vida del pueblo y de donde un día partió quién me envenenó con esto del toro, y al que años después volvió para siempre, para poder disfrutar de su tierra, del toro, del campo y de lo que le acercaba definitivamente a los suyos. Uno no nació allí, pero bueno, eso es lo de menos; incluso la gente de una edad ya ni ha oído hablar de mi familia. Ya no debe quedar nadie que al verme por la calle me identificara con mi abuelo o con mi padre por el aspecto, incluso hasta me tomarán por un forastero, uno de tantos que acuden a las fiestas, el último martes de septiembre y el fin de semana que le precede. Pero bueno, para mí seguirá siendo mi pueblo.

Como si fuera un regalo del cielo, un amigo me comentó hace mucho que si yo querría exponer allí mis toros y toreros, ¿cómo no? que orgullo; y meses después recibí una llamada del alcalde del pueblo, haciéndome el ofrecimiento de una sala en el ayuntamiento, en la plaza mayor del pueblo. No es que no me pudiera negar, es que no quería negarme. Se me vinieron muchas cosas a la cabeza, ideas que no se las lleva ni un huracán, imágenes de mi padre, yo jugando al toro en la plaza que ponían antes en la misma plaza mayor, la gente jaleando a los torerillos, la feria del ganado en la que uno ponía poses de torero, como si las vacas de carne le fueran a entrar a la muleta, mis abuelos escuchando la retransmisión por la radio de las corridas de Salamanca y algo que repetía mi abuelo una mañana de sol, sentado en una ventana, mientras me vigilaba en mis juegos: “Salamaaanca laaaa blancaaaa”.

Pues allí me iré a colgar mis toreros, mis ilusiones, mis recuerdos y mis dos aficiones, el toro y la pintura. No sé cuanta gente pasará, de familia nadie, pues nadie queda allí, pero seguro que lo harán algunos que son más que familia y con los que recordaremos al que ya no está, pero eso tampoco es novedad, porque su amigo desde niño y yo, todos los años en San Isidro, bien un día u otro, o bien varios días, nos ponemos a hablar de su infancia y ya empezamos la tarde más tiernos que el pan Bimbo. Pero bueno, aunque uno se enternezca, son recuerdos que gustan.

Yo invito a todo el mundo a que se pase por allí este fin de semana y estoy seguro que de una manera u otra, estaréis todos, los de México, Venezuela, Galicia, Levante, Andalucía, Francia, Madrid y tantos sitios, incluidos los lectores silenciosos de Estados Unidos u Oriente. Yo así lo sentiré, porque de una manera u otra, todos me habéis ido pegando empujoncitos para seguir para adelante. Eso sí, a los que vayáis en persona, recomiendo que se provean de embutidos bendecidos por la gracia divina, que se detengan a ver la filigrana charra de los descendientes de un señor con el que yo me quedaba embobado viendo enroscar la plata, el castillo que solo se ve desde fuera, y si hay tiempo, aparte de ver los encierros a caballo, pues comer un buen cocido o cabrito, que nunca vienen mal. El que escribe esto, además se pasará por la iglesia para rendir visita al Cristo del Amparo, el que cuida a todo hijo de Tamames, haya o no nacido en sus contornos, y a los que de vez en cuando nos llama para que volvamos por unas horas a la tierra de nuestros mayores. Allí os espero.

22 comentarios:

Xavier González Fisher dijo...

Pues vaya a Tamames, que seguramente allá no habrá quien le mande callar... Y que "haiga" mucha suerte...

Un abrazo desde Aguascalientes, México.

fabad dijo...

Enrique, ¡enhorabuena!. Imagino tu ilusión y tu emoción. Me he identificado contigo a medida que te leía. Yo tampoco soy de "mi pueblo", pero cada año aparezco por allí, aunque solo sea un rato, allí respiro mejor y visito a la Santa Cruz, que mis hermanos y yo llevamos en nuestro nombre en último lugar. Te entiendo perfectamente y te envidio. Yo no tendría nada que exponer pero imagino tu sentimiento. Y por supuesto, que, aunque no sea fisicamente, alli voy a estar.
Un abrazo.
(Ahora viene lo de acertar el maquiavelico acertijo)

MARIN dijo...

No sabes... bueno, si sabes el coraje que me da el no poder estar en Tamames y disfrutar no solo de tus toros y toreros, sino de todo el pueblo, que ya sabes que a mi todo lo que huela a pueblo y tradiciones me engancha.

Espero que disfrutéis este fin de semana todo lo que podáis, que al siguiente ya lo haremos en Madrid.

Por cierto, no hace falta haber nacido en ningún sitio para ser de donde uno quiera. Las raíces tiran mucho.

Un abrazo.

Gil de O. dijo...

Amigo Enrique, bien sabes que soy de pueblo, y además lo llevo con orgullo. Disfruta del tuyo con esa exposición, en la que sin duda, habrás puesto el corazón; aunque tu obra ya lo lleva por delante. Por otra parte, como te acaba de decir José María, "las raíces tiran mucho"

Saludos de Gil de O.

Manolo Troya dijo...

Seguro que habrá puerta grande de las de verdad, enhorabuena Enrique.

Jose Morente dijo...

Magnifica noticia.

Felicidades y suerte ¡Torero!

Saludos

Enrique Martín dijo...

Xavier:
Muchas gracias y seguro que no nos mandan callar, otra cosa es que haya valor para hacerlo, aunque la inconsciencia también ayuda a soltar la lengua.
Un saludo

Enrique Martín dijo...

Fabad:
Pues sí, hay cosas que se llevan dentro y que además uno tampoco quiere renunciar a ellas. Se me juntarán muchas cosas en la cabeza y por supuesto que sentiré la presencia de todo el mundo, que para eso no hace falta viajar.
Un abrazo y yo pensé que había quitado el acertijo. Tendré que probar de nuevo. A mí tampoco me gusta

Enrique Martín dijo...

Marín:
Estaría bien que te enseñara yo el campo de mi pueblo, antes que tú a mí el del tuyo, ¡qué grande! Tranquilo que ya te hartarás cuando te cuente como ha ido todo. Aquí esperamos.
Un abrazo

fabad dijo...

Enrique, si has quitado el acertijo. Es quea me cae tan mal que me he puesto el parche antes de que salga el grano.
Triunfaras seguro. (Como dice Gil de O, ya has triunfado).

Enrique Martín dijo...

Gil de O.:
Pues sí que tiran y si alguien visitara este pueblo, inmediatamente entendería el origen de esta afición que compartimos. El toro bravo siempre presente, en el campo, donde es el rey y en la vida diaria de la gente, algo que sería deseable en todas partes.
Un abrazo

Enrique Martín dijo...

Manolo:
Muchas gracias, solo espero no quedar por debajo del ganado.
Un abrazo

Enrique Martín dijo...

José:
Muchas gracias, se hará lo que se pueda
Un abrazo

franmmartin dijo...

Enrique, me he preparado la ruta,443 Km desde mi puerta a la Plaza Mayor ,sé que en El Soportal de la Plaza se come un fantástico cocido y me sobran ganas para meterme en carretera.
Pero,ya salió el pero, tu sabes que tengo obligaciones familiares que me ocupan cada fin de semana y me quedo con las ganas ,lo mismo que de asistir con el amigo Marín a la novillada de Las Ventas.
Como estoy seguro de tu éxito,solamente desearte que lo disfrutes a tope y que recargues bien las pilas con la nostalgia.

Enrique Martín dijo...

Fabad:
Yo no soporto el acertijo, es un castigo que creo que no merecemos, jajajajaja
Un saludo

Enrique Martín dijo...

Franmartín:
Hay varios sitios en el pueblo donde se come un estupendo cocido, no apto para malos comedores, y después hay donde comprar un embutido para morirse. Y encima el sábado por la tarde, encierro de vacas y hasta visita a alguna ganadería. Menudo plan ¿eh? Ya sé yo que si no te pones de viaje es porque hay algo que te lo impide irremediablemente, me consta de sobra y te lo agradezco muchísimo. Muchas gracias por tus deseos y espero poder contaros muchas cosas buenas.
Un abrazo

Anónimo dijo...

Suerte Enrique, espero que todo salga bien.

Un saludo
J.Carlos

Enrique Martín dijo...

J. Carlos:
Muchas gracias.
Un saludo

MiguelitoNews dijo...

Mucha suerte Enrique.
Seguro que sales por la puerta grande.
Un saludo.

David Campos dijo...

Enrique:

Estoy seguro de que todo saldrá muy bien. Tamames o cualquier sitio donde haya una pared que deje colgar tu obra, siempre será un buen lugar para mostrar el trabajo.

Muchísima suerte y un fuerte abrazo, apoderado!!

Enrique Martín dijo...

Miguelito:
No he salido por la puerta grande, no he hecho méritos para ello, ójala. Pero me he pegado un baño de gente muy querida, de un trato increíble y de recuerdos, que se me van a tardar en pasar los efectos. Muchas gracias y un saludo

Enrique Martín dijo...

David:
Un día me dijiste unas sabias palabras sobre las exposiciones y no se me han borrado de la mente. Eso sí, también te digo que gracias a ellas, solo disfruto, mucho, y no pienso en nada más.
Un abrazo fuerte.